Universidad Autónoma de Aguascalientes

El doctor Alfonso Pérez Romo fue estudiante y profesor del IACT, formó parte del grupo de fundadores que dieron vida a la Universidad Autónoma de Aguascalientes en 1973, pero también fue quien encabezó el proyecto de creación de la Escuela de Medicina y, años más tarde, se desempeñó como decano del entonces Centro Biomédico. Es un incansable promotor cultural, que hasta la fecha podemos encontrar en la universidad, siempre con un libro en la mano. En suma, ha tenido una participación decisiva en los momentos históricos de nuestra Institución.

Durante su gestión como rector de la UAA (1978-1980) enfrentó dos grandes retos: uno de ellos fue la búsqueda del presupuesto que requería la naciente universidad, que en ese tiempo demandaba una insistente gestión ante las autoridades educativas federales. Otro gran desafío, según nos narró en entrevista, fue la defensa de autonomía: “la segunda cuestión que me tocó enfrentar fueron los movimientos políticos y sociales que involucraban mucho a las universidades. Entonces, las diversas corrientes políticas e ideológicas estaban muy calientes, habían sucedido muchas cosas en México, querían apoderarse de las universidades como arietes políticos, echando a perder las universidades; se acababan, como se acabaron algunas. Costó trabajo, pero defendí bien la autonomía de la UAA”.

En este sentido, mencionó que la razón de ese tipo de atracos se debe a que las universidades siempre han sido llamativas, en virtud de que son centros importantes que congregan a un grupo muy grande de personas pensantes, maestros y administrativos de un muy buen nivel, gente muy culta; y una gran cantidad de estudiantes que pueden manipular. Entonces, dijo, las universidades son presas muy atractivas para entidades externas; de alguna forma los gobiernos quieren tener un control sobre ellas, pero debe ser un control positivo, es decir, sin meterse en la administración o la organización de los maestros y resguardando la autonomía de la universidad, tenerla bien abastecida y atender sus necesidades, así como vigilar el buen uso de los recursos. Todo eso hará que las instituciones de educación superior (IES) cumplan perfectamente con sus funciones.

Por lo anterior, el doctor Alfonso Pérez Romo dijo que se debe acotar lo que es la autonomía en relación con las IES, para saber perfectamente en qué consiste, cuáles son los derechos y cómo debe ser atendida y respetada por todos los integrantes de una comunidad, desde las autoridades, los sindicatos, los estudiantes, los profesores… todos los que forman parte de la vida universitaria, todos debemos saber qué es, en qué consiste y cuáles son sus límites.

La autonomía es el alma de las universidades. Por ello, es responsabilidad de todos los universitarios tomar conciencia sobre la importancia de este valor. En respuesta, la UAA ha contribuido a la investigación, la educación y la formación integral de los individuos, la difusión del conocimiento y la cultura. La misión de las universidades de todo el mundo y en todas las épocas, ha sido el motor de las sociedades humanas.

Sobre la UAA a futuro, el doctor Alfonso Pérez Romo visualiza esta institución como una entidad educativa cada vez más importante: “La Universidad Autónoma de Aguascalientes se está volviendo un referente nacional y esto es muy importante. Al principio, nos atacaban bastante, porque cimbramos a las comunidades que ya estaban asentadas en la educación superior de México, nos chiflaban al subir al estrado; ahora es al revés, pudimos chiflar, pero no lo hicimos porque somos solidarios con todos. Esta universidad seguirá creciendo en todos los sentidos, pero sobre todo en el aspecto del pensamiento y la cultura; será una universidad con innovaciones importantes que exige la transformación de la cultura en el mundo actual”.

Finalmente, cierra esta participación con un mensaje a las nuevas generaciones que les tocará construir la universidad: “Creo que hay un riesgo muy grande en todos los cambios que ha habido en la historia de la humanidad, pero pocos han sido tan bruscos, violentos y profundos como el que se está dando ahora. Están cambiando todas las costumbres, el modo de concebir el universo, de vivir la vida y entenderla; todos los conceptos viejos que eran las vigencias sociales que nos hacían convivir en paz, están desquebrajándose. Entonces, es muy importante que los universitarios sepan que tienen el deber de ponerse al día con todos los adelantos de la ciencia y la tecnología y de los retos que imponga la cultura moderna, sin perder el aspecto esencial del humanismo verdadero, el sentido moral de la vida y de vivir para otros”.

“Es muy importante que los universitarios sepan que tienen el deber de ponerse al día con todos los adelantos de la ciencia y la tecnología y de los retos que imponga la cultura moderna, sin perder el aspecto esencial del humanismo verdadero, el sentido moral de la vida y de vivir para otros”.