Universidad Autónoma de Aguascalientes

¿Qué sucede con el petróleo a nivel mundial?

gaceta uaa

Aunada a la contingencia sanitaria mundial, tenemos otra de carácter económica que está afectando el mercado de los energéticos. Es necesario explicar que no existe una sobreproducción de petróleo, sino que la situación por la que atraviesa el precio de los hidrocarburos se debe a la contracción de la demanda agregada de los productos que emanan del petróleo, tales como gasolina, aceites, plásticos, entre otros; es decir, la necesidad de estos productos ha bajado a causa de la pandemia.

Al respecto, el maestro Samuel Alejandro Muñoz Romo, profesor-investigador del Departamento de Economía de la UAA, comentó que lo anterior se establece a través de las compañías tenedoras, aquellas que tienen los contratos para la compra del petróleo y que, al no existir la misma demanda de los insumos, dejan de adquirirlo porque sus almacenes y bodegas están llenos. Además, si consideramos que la producción del petróleo no se ha detenido, ya que no se han cerrado pozos a nivel mundial, el problema radica en que no hay mercado para colocar dicha producción.

El académico universitario recordó lo sucedido en la década de los noventa con la Guerra del Golfo Pérsico, la llamada Tormenta del Desierto, cuando cayó la producción del petróleo porque Arabia, principal productor del energético, dejó de producir ante los embates de la guerra, ocasionando automáticamente un incremento estratosférico de su precio. La repercusión en ese entonces fue que muchas economías planificadas comenzaron a establecer el desarrollo de su economía en función del precio del petróleo. Por otra parte, está la situación que genera Estados Unidos, el país con la mayor reserva en el mundo, al poner todas sus reservas a la venta y, por ende, provocar la caída del precio del petróleo de un día para otro.

Estamos viviendo una situación antagónica a la Guerra del Golfo. La baja demanda de los derivados del petróleo representa un gran problema para la economía mundial, pues cada insumo no sigue su cadena de suministro regular, cuyo eslabón final, por ejemplo, es la gasolinera de cualquier esquina, mencionó Samuel Alejandro Muñoz Romo.

Durante muchos años, nuestro país tuvo una economía con base en el petróleo: es decir que la venta del energético era la principal fuente de ingreso nacional. Ahora, continúa siendo una fuente de ingreso, pero no es la principal; además, la economía mexicana se basa en el sector terciario o de servicios, el cual también está detenido a causa de la pandemia.

En México, esta situación global de los bajos precios del petróleo afectará el crecimiento económico y el ingreso directo del país. Una solución, además de reducir la producción petrolera, podría ser la proyección de las cadenas de suministro a corto, mediano y largo plazo para visualizar los posibles escenarios una vez que se termine la contingencia sanitaria, ya que en automático habría una reactivación y demanda de los insumos, por lo que siempre será ideal tener un excedente y no una escasez de hidrocarburos.

Finalmente, el maestro Samuel Alejandro Muñoz Romo hizo énfasis en que, una vez que salgamos de la contingencia sanitaria y económica, México debe contar con todos los recursos necesarios para entrar fuertemente en el mercado y posicionarse, para provocar que, a su vez, el precio del petróleo en los mercados internacionales retome sus estándares operativos.