Universidad Autónoma de Aguascalientes

“Manos que construyen”

PDF | 20 | Hace 5 días | 13 diciembre, 2024

Dra. en Admón. Sandra Yesenia Pinzón Castro

Hace unos días, gracias a un proyecto del Centro Universitario de Desarrollo Comunitario de la UAA, alumnos de nuestra casa de estudios que cursaron el “Taller de Diseño Social” entregaron un conjunto de muebles a 14 familias con vulnerabilidades económicas, radicadas en la comunidad de Lotes de Los Arellano. Cabe destacar que estos muebles, consistentes en comedores, bases para cama y estantes para ropa, fueron diseñados por los propios estudiantes, basándose en un diagnóstico previo de las necesidades de la comunidad mencionada, realizado por estudiantes de Trabajo Social también de esta casa de estudios.

Durante el evento de entrega, en el que tuve el honor de participar, expresamos un breve mensaje de reflexión sobre las Instituciones de Educación Superior y su impacto en el entorno social. De dicho mensaje, transcribo algunas líneas, esperando que sean del interés de las y los lectores de este medio:

Uno de los objetivos más importantes de nuestra universidad es lograr que los programas educativos y servicios que damos para la formación integral de nuestros estudiantes, les permitan a estos últimos egresar con mucha conciencia social y una gran vocación de servicio.

Además, como institución educativa de nivel superior tenemos un compromiso con la atención a las necesidades de la sociedad, a través de proyectos y esfuerzos de vinculación; es decir, de acciones que lleven la universidad a la ciudad, las comunidades y el campo, a fin de ver cómo podemos apoyar con los conocimientos, productos y servicios que generamos desde nuestro quehacer cotidiano.

Todo lo anterior tiene una razón importantísima: los programas de una institución educativa, así como sus proyectos de investigación, no pueden darse en una burbuja sin interés por lo que sucede alrededor. Muy al contrario, la tarea es que, con todo el conocimiento y las herramientas teóricas y prácticas que tenemos, las universidades seamos impulsoras de bienestar en los entornos donde nos desenvolvemos.

Es desde esta posición y estas acciones que puede reflejarse un verdadero compromiso con la cultura de paz y el bienestar social. Es desde el servicio y el cambio en nuestro pensamiento que podemos abandonar la pasividad o la nociva actitud de que “el mundo nos debe algo”, para convertir esa fuerza en un impulso más honesto y mucho más empático y humano. La cultura de paz y el humanismo deben alejarse de cualquier asomo de rencor o mezquindad para, en lugar de ello, partir de las siguientes preguntas fundamentales: ¿Hoy cómo puedo ser una mejor persona?, ¿hoy cómo puedo hacer del entorno un sitio más justo y digno para todos?

En este orden de ideas, el compromiso de las universidades debe ser el de seguir esforzándonos todos los días para que nuestras comunidades comprendan que la cultura de paz y de equidad, para ser tale, debe ser forzosamente una cultura de servicio, humanismo y fraternidad, alejada de otras ideas e intereses de grupos particulares. Inmersos en esta tarea, podemos decir abiertamente que la Universidad Autónoma de Aguascalientes sabe que se debe a la sociedad y que, como comunidad, vamos a seguir trabajando para ayudar a hacer de este un mundo mejor.

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