BOLETÍN DE PRENSA No. 183 –>>
• En los casos de robo de identidad la principal vulnerabilidad se encuentra en la exposición de datos e información personal por parte de los usuarios.
• Se están extrayendo cerca de 5 millones de tweets a la semana para identificar temas más recurrentes de seguridad digital y factores que originaron problemáticas o delitos informáticos.
• Un país que carece de mecanismos de protección refleja una sociedad con poco conocimiento sobre sus derechos y obligaciones digitales: LEBV.
A partir de una investigación sobre seguridad digital, en particular sobre sistemas de computación basados en la nube, se está detectando que en los casos de robo de identidad la principal vulnerabilidad no se encuentra en las propias plataformas virtuales, sino en la falta de cuidado en la exposición de datos e información personal por parte de los usuarios; advirtió el catedrático e investigador del departamento de Sistemas Electrónicos, Luis Eduardo Bautista Villalpando, quien realiza un estudio sobre seguridad en la nube (Cloud secure).
El también coordinador de la Academia de Redes y Sistemas Distribuidos comentó que cada semana hay un caso de violación de datos, ataques a servidores, desfalco electrónico, robo de identidad o secuestro informático, por lo que en el ámbito digital será prioritario el tema de la seguridad integral durante los próximos siete años, y para su desarrollo es indispensable identificar tanto los elementos tecnológicos para la protección de los usuarios, así como en sus prácticas.
Por ello se está desarrollando una investigación que pretende establecer mecanismos de seguridad en la nube, es decir, el espacio de almacenamiento digital donde se albergan fotografías, datos de medios sociales y correos electrónicos, que ha incrementado su brecha de seguridad ante una infinidad de sistemas y proveedores, como Google, Apple, Android y un mayor uso de televisores inteligentes.
Debido a la multiplicidad de unidades económicas, redes y sistemas informáticos, Bautista Villalpando explicó que este proyecto se enfocará en analizar en una primera etapa cuáles son los puntos de seguridad más débiles de las personas y algunas empresas a través de medios sociales, por lo que se están extrayendo cerca de 5 millones de publicaciones en Twitter (tweets) a la semana para identificar los temas más recurrentes de seguridad digital entre los usuarios, así como los factores que originaron problemáticas como robo de identidad o desfalcos.
Al respecto, el catedrático adelantó que en los casos de robo de identidad se ha detectado que las personas no protegieron sus datos, pues manejan perfiles de usuario abiertos y publican vasta información personal, lo cual les hace blancos fáciles para delitos informáticos; además de que algunos grupos delictivos buscan acercarse a los jóvenes a partir de sus consumos virtuales; por lo que son indispensables este tipo de proyectos que buscan brindar herramientas de seguridad integral.
Después de tener el modelo de prevención se aplicará en casos reales para pasar a una prueba piloto de seguridad donde se tengan herramientas tecnológicas así como propuestas de actuación para incrementar los niveles de protección de los usuarios.
De esta forma enfatizó que la seguridad digital también está correlacionada con el nivel de desarrollo de las naciones, pues un país que carece de mecanismos de protección refleja una sociedad con poco conocimiento sobre sus derechos y obligaciones como usuarios, lo cual no sólo implica delitos informáticos, sino omisiones que reproducen o agrandan diferentes problemáticas; por lo que indicó que algunos de los derechos digital que deben ser concientizados son la privacidad y el derecho a la información como ciudadanos; mientras que algunas obligaciones son la protección de datos personales y de terceros, así como la verificación de fuentes antes de compartir una publicación.
Cabe mencionar que en este proyecto también colabora la Escuela de Tecnología Superior en Montreal, Canadá, donde ya se han aplicado otros modelos desarrollados por investigadores de la UAA, como uno de auditoría fiscal que se implementó el año pasado, por lo que también se desarrollará con dicha institución una prueba piloto al finalizar la investigación.