BOLETÍN DE PRENSA No. 387 –>>

No siempre hay capacidad para ampliar los espacios o servicios de las universidades, o para aceptar más alumnos, pero la Universidad Autónoma de Aguascalientes, con el despunte de su nueva sede al sur de la ciudad, es muestra de una inversión que redituará a favor de la sociedad; comentó el Rector de la UNAM, José Narro Robles, durante su ponencia magistral en el marco de los festejos del 39 aniversario de la UAA.

El prestigiado universitario comentó que a pesar de los avances en México para incrementar el acceso a la educación, nuestro país aún se encuentra en rezago. Informó que en el ciclo escolar 2011-2012, la tasa bruta de cobertura fue de sólo 32.8% en estudios superiores.

En resumen, Narro Robles expresó que la cobertura apenas llega al 30% de los jóvenes en la edad correspondiente, muy por debajo de los demás países de la OCDE e, incluso, de varios de América Latina.  De esta forma subrayó que uno de los más grandes retos de la educación superior en México es llegar a un 60% de cobertura en una década, meta que promulgó la ANUIES en el documento “Inclusión con responsabilidad social. Una nueva generación de políticas de educación superior”.

Además de la problemática del acceso a la educación, el Rector de la Máxima Casa de Estudios del país expresó que suele criticarse que no exista una correspondencia absoluta entre la formación universitaria y  el mercado de trabajo, lo que repercute en el desempleo y subempleo entre los egresados. Sin embargo, expresó que esta relación entre el sector económico y educativo debe reestructurarse: “la educación superior en México tiene que modificar el sistema laboral y no debe ser que este último prevalezca sobre el primero”.

Explicó que desde ciertos sectores y organismos es frecuente el intento por reducir el impacto de la educación superior, aún más la pública, al ámbito económico, la producción de bienes y servicios, entre otros. Sin embargo, “el impacto económico es sólo un aspecto de la influencia social de las instituciones de educación superior en los países en desarrollo”. De esta forma, manifestó que en el papel de las universidades públicas se encuentra una amplia gama de funciones de carácter social, cultural y político que no pueden ser evaluadas exclusivamente en términos de su impacto económico.

Finalmente, el Rector de la UNAM comentó que se deben incrementar tanto las actividades de desarrollo científico y tecnológico, como las de investigaciones sociales, de humanidades y extensión de la cultura.

Debido a esto, una de las principales propuestas es la creación de polos regionales de investigación, por lo que el dirigente se congratuló de los convenios de colaboración con la Autónoma de Aguascalientes y con Gobierno del Estado. “El país requiere de ciencia y tecnología propia, la dependencia de lo que viene del extranjero, equivale a condenarnos a la mediocridad, a ser una nación maquiladora, a sacrificar soberanía, a hipotecar parte del futuro del país”; concluyó.