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El día de ayer, a nombre de la comunidad universitaria, tuve el honor de dar inicio a la segunda edición de la Cátedra Alfonso Pérez Romo, instaurada el año pasado con el fin de divulgar el conocimiento del estudio del arte y la gestión cultural. En esta ocasión contamos con la presencia del doctor Jorge Juanes López, reconocido filósofo y crítico de arte, quien es investigador de tiempo completo del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.
Estoy convencido de que el verdadero sustento del arte, su motor principal, es su vocación por el cambio. Es la aceptación de las nuevas formas de ver el mundo; es el continuo modificar las técnicas, los signos, las ideas, los espacios, las concepciones estéticas. El arte no tendría sentido si negáramos que el mundo es dinámico; si pensáramos que lo pasado fue siempre mejor y anulamos en nuestro espíritu la posibilidad de grandes transformaciones por venir.
El ser humano, sin lugar a dudas, ha necesitado de las artes para transformar su entorno. Es imposible pensar la historia de la humanidad contemplando únicamente los aspectos materiales de la vida, dejando de lado aquellas dimensiones que correspondan al necesario cultivo del espíritu.
Las artes imprimen a nuestra experiencia de vida una conciencia más rica de nosotros mismos y de la sociedad. Esto ha permitido al ser humano transformar su realidad desde las cuevas de Altamira, pasando por el desarrollo de las diferentes culturas, hasta un sinfín de movimientos y posturas artísticas que han reformado y renovado el arte y a la humanidad hasta llegar a nuestros días.
En ese sentido, el Centro de las Artes y la Cultura nació con el propósito de congregar y reforzar las disciplinas relacionadas con el quehacer artístico y la gestión cultural; una tarea que la Universidad estaba llamada a continuar realizando con toda responsabilidad, entusiasmo y generosidad, dada la importancia del impulso a las artes y el desarrollo de la gestión cultural para la vitalidad de una sociedad democrática como la nuestra.
El Centro de las Artes y la Cultura debe su nacimiento, en gran medida, a la voluntad de pensamiento y acción del doctor Pérez Romo. Por esa razón, de manera muy merecida, ésta Cátedra, que llega a su segunda edición, lleva su nombre. De esta forma los universitarios agradecemos a quien encabezó los esfuerzos para que viera la luz la maestría en Artes y la licenciatura en Ciencias del Arte y Gestión Cultural.
Sostengo que la permanente demostración de amor al saber y su visión de futuro, el doctor Alfonso Pérez Romo se nos presentan a los universitarios como guía. Las valiosas enseñanzas que nos da su ejemplo de vida, las atesoramos y ponemos en práctica, para cumplir con la misión humanista que dio vida a nuestra Casa de Estudios. Ennoblece a nuestra Institución contar con personas como él, quienes han dejado una marca permanente en la historia de Aguascalientes y de México.
Los universitarios tenemos la certeza de prestar un valioso servicio a la sociedad al difundir las artes; formando mejores individuos, con sensibilidad, creatividad y espíritu crítico. Por ello, continuamos transformando a nuestra Institución,y ponemos un énfasis muy especial en nuestro pensar y actuar con relación a la difusión cultural y la formación profesional de artistas, creadores y gestores culturales. De esta manera seguimos comunicando nuevas formas de ver el mundo a través del arte. |
MARIO ANDRADE CERVANTESCategorías: Editorial Rector